Actualizado 27/06/2014 05:39

El juez rechaza la solicitud de Argentina de no ejecutar el fallo de los "fondos buitre"

NUEVA YORK, 26 Jun. (EUROPA PRESS) -

   El juez federal estadounidense ha Thomas Griesa ha rechazado la solicitud formulada por el Gobierno de Argentina para suspender la ejecución del fallo que obliga al país suramericano a pagar a los tenedores de deuda pública que no se sumaron a las reestructuraciones.

   "En una carta fechada el pasado 23 de junio, Argentina solicita a esta Corte que suspenda la orden judicial relativa a la cláusula 'pari passu', pero dicha solicitud no es apropiada porque dicha cláusula no es aplicable hasta que el país pague a los bonistas, algo sobre lo que la Corte no tiene control", ha explicado Griesa en una resolución.

   No obstante, ha recordado que ha designado a "un representante especial para asistir en el inicio de unas negociaciones". "Esta Corte entiende que dichas negociaciones incluirán cualquier pago a los bonistas", ha apuntado, según ha informado el portal Infobae.

   El Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner pidió el pasado lunes a Griesa "una medida suspensiva de la sentencia que obliga a pagar el total de lo adeudado a los fondos buitre, al momento de hacer el próximo pago de vencimiento de la deuda, el 30 de junio".

   "Nosotros consideramos que es esencial que el juez otorgue una medida suspensiva para que Argentina pueda continuar pagando normalmente a los bonistas de la reestructuración", dijo el ministro de Economía, Axel Kicillof.

   Fernández de Kirchner ya expresó el pasado viernes su deseo de "cumplir con el cien por cien de los acreedores". "Con el 92,4 por ciento que aceptó los canjes de 2005 y de 2010, y con los que no ingresaron", dijo en el discurso del Día de la Bandera.

   A cambio, pidió "que se generen condiciones de negociación justas, de acuerdo con la Constitución de Argentina, con las leyes internacionales y con los contratos que se firmaron con ese 92,4 por ciento de los acreedores".

   El Tribunal Supremo de Estados Unidos ha dejado en firme la decisión de tribunales inferiores de condenar a Argentina a pagar a los 1.300 millones de dólares (980 millones de euros) que debe a los bonistas que no se sumaron a la reestructuración.

   El Gobierno advirtió de que el levantamiento de la medida cautelar que evitaba que el país tuviera que pagar a los "fondos buitre" impediría a Argentina pagar a los demás acreedores el 30 de junio, pero este jueves ha saldado su deuda con ellos.