(((Esta noticia corrige a la anteriormente transmitida sobre este tema por un error en el titular))) El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo, ha defendido este martes que su reciente visita a Cuba fue exitosa, pues la conferencia que dio sobre la Transición española le permitió "decir las verdades del barquero donde las tenía que decir", en referencia al alegato que hizo del pluralismo político. En una comparecencia ante la Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso para presentar la Estrategia de Acción Exterior elaborada por el Gobierno, ha advertido de que su viaje habría resultado "fallido" si se hubiera limitado a "ir a Cuba" sin dar una conferencia "delante de todos los diplomáticos cubanos hablando de libertades, de derecho de los representados a elegir sus representantes, y de los pactos de Naciones Unidas" sobre Derechos Humanos, ha señalado. García-Margallo también ha defendido su desplazamiento a la isla porque en su opinión, la situación de Cuba ha cambiado radicalmente desde 1996, cuando el PP impulsó la Posición Común de la UE que condiciona la cooperación con la isla a que haya avances en democracia y derechos humanos. La situación de la isla en la actualidad es "completamente distinta", ha sostenido. En el 96 --ha argumentado-- Cuba estaba "aislada" mientras que hoy forma parte de la Comunidad de Estados Caribeños, el Alba, y ha presidido la CELAC, Comunidad de Estados latinoamericanos y del Caribe. "Y va a estar en la Cumbre de las Américas (de la OEA) en Panamá", donde coincidirá por vez primera en la historia con EEUU en una cumbre, ha avanzado. "Algo está cambiando en el panorama internacional e ignorar eso sería suicida", ha dicho. "Pero ir a Cuba y no hacer la conferencia que yo hice delante de todos los diplomáticos cubanos hablando de libertades, de derecho de los representados a elegir sus representantes, de los pactos de Naciones Unidas es un viaje fallido", ha subrayado. "Yo fui a Cuba y dije las verdades del barquero donde las tenía que decir", ha defendido. Desde el PSOE, la portavoz de Exteriores, Trinidad Jiménez, ha rehusado criticar el viaje del ministro a la isla porque su partido, ha dicho, cree que la política iberoamericana de España debe ser una "política de Estado". No obstante, ha recordado que la posición del PP cuando estaba en la oposición fue bien distinta ya que cuando el exministro Miguel Angel Moratinos viajaba a Cuba "los comentarios eran profusos y no muy amables".