Prevé un aumento de dos dígitos en su beneficio para el año
MADRID, 30 Abr. (EUROPA PRESS) -
Iberdrola obtuvo un beneficio neto de 2.004 millones de euros en el primer trimestre del año, lo que representa una caída del 27,4% con respecto a los 2.759 millones de euros de hace un año, cuando registró plusvalías millonarias por la venta de activos en México, informó la compañía.
En términos homogéneos, estas ganancias de la eléctrica presidida por Ignacio Sánchez Galán representan un incremento del 26% frente al resultado ajustado del primer trimestre de 2024.
El beneficio bruto de explotación (Ebitda) del grupo se situó en los 4.643 millones de euros en el primer trimestre, lo que supone un incremento del 12% más respecto al año anterior -excluyendo las desinversiones en generación térmica del año pasado-.
La cifra de ventas de Iberdrola en el periodo de enero a marzo de 2025 alcanzó los 12.864,7 millones de euros, con un crecimiento del 1,46% con respecto al mismo periodo del ejercicio anterior.
Así, la energética ha reiterado las previsiones para el conjunto del año, en el que prevé un aumento de dos dígitos en el beneficio neto, teniendo en cuenta el reconocimiento de costes pasados en los Estados Unidos, ya registrado en estos resultados del primer trimestre.
Iberdrola ha realizado unas inversiones récord de 17.300 millones de euros en los últimos 12 meses, lo que supone un incremento del 44%, respecto al mismo periodo del año anterior.
En los tres primeros meses del año, estas inversiones ascendieron a 2.720 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 14% respecto al mismo periodo del año anterior. Estados Unidos y Reino Unido fueron las principales áreas de destino, donde dirigió el 65% del total.
Por negocios, las redes eléctricas representaron el 53% de la inversión total, alcanzando los 1.432 millones de euros en el primer trimestre, un 18% más que el mismo periodo del año anterior.
Esto ha permitido al grupo que sus activos regulados hayan subido un 14%, hasta los 49.000 millones de euros tras integrar ENW y que se haya elevado la previsión para el cierre del ejercicio hasta los 51.000 millones de euros.
Por su parte, las inversiones en renovables fueron selectivas y se situaron en los 1.064 millones de euros, lo que supone un incremento del 7%. Más de la mitad de este importe se destinó a la eólica marina; con los proyectos East Anglia 2 y 3 (Reino Unido) y Vineyard Wind (EE.UU.) representando el 80% de la inversión.
Los fondos generados en operaciones (FFO) del grupo crecieron un 11%, hasta 3.502 millones de euros, situándose el ratio financiero FFO ajustado sobre deuda neta ajustada en 22,3%, con una posición actual de liquidez de 20.905 millones de euros, que cubre 19 meses de necesidades de financiación.
La deuda financiera neta ajustada de Iberdrola se situó en 55.685 millones de euros, aumentando con respecto a diciembre 2024 debido, principalmente, a la consolidación de la deuda de ENW -unos 2.300 millones de euros- y al bono híbrido recomprado a principios de año (unos 800 millones de euros).
La energía distribuida por las redes de Iberdrola superó los 62.500 gigavatios hora (GWh) en el primer trimestre, un 1,7% más respecto al mismo periodo de 2024. Ante las nuevas demandas de electrificación, la compañía se ha comprometido a invertir más de 13.000 millones de euros entre 2025 y 2026 en el negocio de redes.
Además, la compañía ha instalado unos 2.600 megavatios (MW) renovables en los últimos doce meses, con lo que la capacidad instalada renovable de la compañía se sitúa en los 44.675 MW en todo el mundo.
Gracias a esta capacidad, la compañía ha alcanzado los 25.222 GWh de generación renovable durante los tres primeros meses del año, un 4,9% más que en el mismo periodo del año anterior impulsado por el buen comportamiento de Estados Unidos, Iberia y resto del mundo.
Por otra parte, el grupo tiene previsto que entren en operación cerca de 4.000 MW renovables este año, con el 100% de la energía vendida para 2025.
ESCASO IMPACTO DE LOS NUEVOS ARANCELES.
Asimismo, la compañía aseguró que tiene un escaso impacto de los nuevos aranceles porque tiene asegurado el crecimiento a futuro. De esta manera, el 80% de las compras las realiza con proveedores locales y el 100% de los contratos estratégicos de los proyectos en construcción ya están asegurados.
Así, la nueva política comercial no tendrá impacto en los resultados, mientras que el coste de las inversiones se verá afectado en menos de un 1%.
DIVIDENDO.
En lo que respecta a la retribución a sus accionistas, la compañía tiene previsto, si es aprobado por su próxima junta general de accionistas, el pago de un dividendo complementario de 0,404 euros por acción en julio, que se sumará al distribuido en enero de 0,231 euros brutos por acción.
El dividendo total con cargo al ejercicio fiscal 2024 se incrementará un 15% respecto al abonado por los resultados de 2023. A este importe se añadirán 0,005 euros por acción si el quórum de constitución de la junta alcanza el 70%.