MADRID 5 Jun. (EUROPA PRESS) -
Los copresidentes del prokurdo Partido Democrático de los Pueblos (HDP) han anunciado que no se presentarán a la reelección al frente de la formación tras los resultados obtenidos en las presidenciales y parlamentarias celebradas recientemente en Turquía.
Mizat Sancar y Pervin Buldan han desvelado que no presentarán su candidatura en el próximo congreso del partido, a raíz de las críticas internas por los malos resultados del partido en los comicios, en los que perdieron seis escaños respecto a 2018, además de no presentar a un candidato a la Presidencia para apoyar al opositor Kemal Kilidaroglu, derrotado en segunda vuelta.
"Estoy preparado para hacer lo que me corresponda en todas las etapas de esta lucha, pero teniendo en cuenta las críticas, me honrará entregar mi copresidencia a otro amigo en el Congreso", dijo Buldan, una de las más destacadas políticas del HDP durante los últimos años, según ha recogido la cadena de televisión kurda Rudaw.
Asimismo, ha argumentado que uno de los motivos de la pérdida de votos en las legislativas --en las que el HDP ha obtenido 61 de los 600 escaños-- fue una "falta de inclusión de los diferentes componentes", entre ellos "armenios, yazidíes o personas con discapacidad". "No salimos de los círculos. No pudimos crecer", ha lamentado.
El anuncio de la cúpula del HDP ha llegado apenas unos días después de que el excopresidente del partido Selahattin Demirtas, encarcelado en Turquía desde 2016, anunciara que abandonaba la "política activa", antes de presentar "sinceras disculpas" por "no ser capaz de presentar unas políticas como las que merece el pueblo".
Demirtas, quien fue copresidente del HDP entre 2014 y 2018, quedó en tercer lugar en las elecciones presidenciales de 2014. Asimismo, se presentó a las presidenciales en 2018 pese a que estaba desde hacía dos años en prisión, desde donde llevó a cabo su campaña política. El político quedó también en tercer puesto en estos comicios.
El político fue detenido en 2016 después de la aprobación de una medida para la retirada de la inmunidad parlamentaria a raíz del intento de golpe de Estado de ese año, que se saldó con cerca de 250 muertos, tras lo que fue imputado por distintos cargos de "terrorismo" por su presunto apoyo al Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), algo que rechaza, e insultos al presidente, Recep Tayyip Erdogan.